Sanidad en el cultivo del guisante
Iván Heras, Delegado de Ventas Castilla León
Emilio Del Campo, Área Manager Castilla León
El guisante proteaginoso es un cultivo importante entre los que se emplean en las rotaciones por diferentes razones:
- Entra en el marco de una agricultura sostenible y acorde con la conservación del medio ambiente
- Ayuda a combatir el déficit de producción de proteína vegetal en España, donde se importa el 90% del consumo
- Tiene reconocidos beneficios sobre el cereal que le sigue en la rotación
- Es reconocido por la PAC
¿Cómo empieza la sanidad del cultivo del guisante?
La sanidad en el cultivo del guisante debe comenzar con la utilización de una simiente libre de plagas y enfermedades, por lo que es recomendable la utilización de semilla certificada, con lo que garantizamos la higiene de la misma.
Varias son las plagas que afectan a este cultivo.
Algunas están producidas por insectos como el pulgón verde, la sitona, los trips y son muy conocidas por los agricultores. Su mayor incidencia se da en las primaveras cálidas en que suele coincidir la floración. Por ello, para controlar los umbrales de tratamiento, es conveniente hacer seguimiento.
La Polilla del guisante es otra afección bastante común, en este caso la oruga se encuentra en el interior de las vainas pudiendo así alimentarse de los granos. Otras, como la Araña Roja y los Agromícidos, aun teniendo una incidencia menor en el territorio castellano-leonés, se deben al menos conocer.
Es importante tener en cuenta que el cultivo no está a salvo ni después de que se ha recogido: también la plaga denominada Gorgojo del guisante merece atención por los daños que produce durante su almacenaje.
Enfermedades causadas por hongos
El guisante también se ve afectado por hongos de varios tipos y con diferentes causantes.
Hongos del suelo, relacionados con excesos de humedad:
- Pytium: causa podredumbre de la semilla o de la plúmula. La enfermedad se manifiesta principalmente en las siembras más tempranas y especialmente en semillas de escaso vigor cuando las condiciones ambientales son de frío y humedad, teniendo como efecto un desarrollo retardado. Los tratamientos fúngicos convencionales de la semilla son efectivos.
- Phoma: todas las variedades pueden verse afectadas por este hongo, pudiendo llegar a la destrucción de la cosecha en combinación con los hongos que provocan fusariosis. La lucha en este caso, también consiste en una buena rotación de cultivos y el empleo de semilla certificada.
- Aphanomices: se trata de un hongo presente en el suelo, que produce podredumbre de las partes más subterráneas de las raíces. Aparece en suelos pesados escasamente drenados. Las rotaciones adecuadas son esenciales para defenderse de este hongo.
- Fusarium oxysporum: hay dos tipos. Podredumbre del tallo, que suele aparecer hacia el final de la floración o durante la formación de las vainas. Y el Marchitamiento del guisante, donde el follaje presenta un color grisáceo que progresa de abajo hacia arriba. Para combatir esta enfermedad, se recurre a variedades resistentes genéticamente y rotación de cultivos.
Se trata de un hongo presente en el suelo, que produce podredumbre de las partes más subterráneas de las raíces. Aparece en suelos pesados escasamente drenados. Las rotaciones adecuadas son esenciales para defenderse de este hongo.
Todas las variedades pueden verse afectadas por este hongo, pudiendo llegar a la destrucción de la cosecha en combinación con los hongos que provocan fusariosis. La lucha en este caso, también consiste en una buena rotación de cultivos y el empleo de semilla certificada.
Dos tipos: Podredumbre del tallo, que suele aparecer hacia el final de la floración o durante la formación de las vainas. Y el Marchitamiento del guisante, donde el follaje presenta un color grisáceo que progresa de abajo hacia arriba. Para combatir esta enfermedad, se recurre a variedades resistentes genéticamente y rotación de cultivos.
Otro grupo de enfermedades fúngicas capaces de producir pérdidas importantes de cosecha:
- Botritis, sus ataques pueden incluso llevar a la muerte de la planta. Aparece a partir de la floración del guisante en años húmedos y cálidos.
- Roya, se ve favorecida por el clima cálido y seco. La propagación de la enfermedad puede ser muy rápida si las condiciones son propicias.
- Antracnosis, hongo que ataca a los tallos, foliolos y vainas. El desarrollo de esta enfermedad se ve favorecido en primaveras húmedas con temperaturas elevadas, pudiendo ocasionar la muerte de las plantas.
Es muy recomendable realizar un seguimiento integral del cultivo por si las condiciones meteorológicas adversas aconsejaran la repetición del tratamiento para conseguir la sanidad del cultivo hasta su recolección.
Otras enfermedades como Mildiu, Oídio, Esclerotinia y Bacteriosis también se deben considerar por el cultivador de guisante.