El cultivo de melón y sandía en invernadero: Plagas y enfermedades
España es el principal productor de frutas y verduras de la Unión Europea.
España es el principal productor de frutas y verduras de la Unión Europea. Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en 2020 la producción de frutas y hortalizas alcanzó los 28 millones de toneladas, un 1% superior a la media de las últimas 4 campañas. De esta cantidad, 12.142.269 millones toneladas corresponden a la producción de frutas y entre los productos frutícolas, destacan el melón y la sandía, cultivos que pertenecen a la north_east familia de las cucurbitáceas .
Según datos del north_east Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación , en la campaña 2020 se obtuvo una producción de 1.234.850 toneladas de sandía y 610.978 toneladas de melón. En el caso de producción de melón, en nuestro país, las zonas donde más se cultiva esta fruta son la Región de Murcia, Castilla-La Mancha y Andalucía. Por otro lado, la sandía se cultiva principalmente en Andalucía (82% Almería), siendo también Murcia, Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana principales productoras.
El cultivo de melón
La época de siembra depende principalmente de la fecha en la que se desea recolectar, si se obtienen los frutos en primavera se obtiene un mayor valor económico en los mercados extranjeros.
El cultivo de melón necesita de climas cálidos y temperaturas más elevadas que el resto de cucurbitáceas para su buen crecimiento y desarrollo, además de mucha luz sobre todo durante la maduración de los frutos. También, es una planta muy sensible a las heladas en su primera fase de cultivo. La temperatura óptima para el desarrollo de la planta oscila entre 20 y 25 º C mientras que, durante la fase de maduración, el rango de temperaturas óptimo es entre 25 y 30º C.
El melón que posee una amplia diversidad de formas, agrupados según características externa normalmente: forma, color tamaño, color de la pulpa sabor, olor, crujiente o no, etc. Las principales variedades de melón cultivadas en invernaderos españoles son:
- Tradicionales españoles (Amarillo, Tendral, Piel de Sapo y Rochet). Son ovalados, alargados, de pulpa blanca, resistentes al transporte, pueden llegar a alcanzar hasta 4-5 Kg. En la actualidad han ido apareciendo híbridos más productivos, precoces y en donde se han incorporado resistencias a diversas enfermedades.
- Cantalupos, son de tamaño más pequeño, entre 0,75-2 Kg. Son generalmente esféricos, ligeramente achatados, de corteza gruesa y piel lisa. Pulpa de color naranja, tierna, dulce y con un aroma característico.
- Galia, esta variedad es cultivada principalmente para exportación. Son frutos de forma esférica u ovalada, de carne blanca, y con pesos generalmente entre 1-2 Kg.
El cultivo de sandía
La plantación de sandía en invernadero se lleva a cabo con semillas previamente germinadas en semilleros, desde septiembre hasta el mes de abril, lo que le permite ganar precocidad frente a la siembra directa.
La sandía es menos exigente en temperatura con respecto al cultivo de melón. El rango de temperatura óptima en el desarrollo del cultivo es de 23-28º C, este rango coincide con el de temperatura óptima para la maduración del fruto.
Existen numerosas variedades de sandía, para poder decidir qué variedad sembrar, se debe tener en cuenta unos criterios de elección, como la exigencia de los mercados de destino, las características de la variedad comercial y los ciclos de cultivo y la alternancia con otros cultivos.
Las principales variedades de sandía que se destacan y se cultivan en España son:
- Crimson Sweet, es una variedad de fruto redondo, con color de piel verde claro estriado. Puede llegar a pesar hasta 15 kg. Su carne es roja, crujiente, dulce. Variedad de ciclo medio.
- Sugar Baby, variedad dulce, con piel lisa de color verde oscuro y pulpa rosa pálido. Sus frutos llegan a pesar hasta los 5 kg. Es una variedad de ciclo corto de maduración, muy productiva.
Ambos cultivos pueden ser afectadas por las mismas plagas y enfermedades. En primer lugar, las principales plagas que afectan al melón y sandía son:
Ácaros
Causan decoloraciones o manchas amarillas en las hojas, pudiendo llegar a secar por completo estas, si las poblaciones son mayores. Se producen los ataques más graves en las primeras fases de desarrollo, favorecidas por las altas temperaturas y la escasa humedad.
Mosca blanca
Las larvas y los adultos se alimentan de la savia de las hojas, causando amarillamiento y debilitamiento de las plantas. También pueden depreciarlos furtos debido a la secreción de negrilla sobre la melaza. En el caso de la mosca blanca es recomendable la aplicación de Gazel® , insecticida sistémico de amplio espectro con actividad translaminar y sistémica.
Trips
El principal daño de esta especie está causado por las larvas y adultos, ya que estos se alimentan del envés de la planta, el cual acaba necrosándose. También pueden causar daño indirecto siendo transmisor de virus, como el virus del bronceado de tomate (TSWV).
Minadores
Las larvas se desarrollan en el tejido vegetal, donde comienza a alimentarse provocando así galerías.
Las principales enfermedades que atacan a estos cultivos son:
Ceniza u Oídio
Es una enfermedad fúngica que se manifiesta en forma de manchas blanquecinas, redondeadas muy características que aparecen en la superficie de las hojas, y puede llegar a afectar, tallos e incluso frutos. Como consecuencia, los frutos pierden calidad y su valor comercial. Las malas hierbas y los restos de cultivos sirven como fuente de inóculo y el viento se encarga de transportar las esporas y dispersar así la enfermedad. Para el control del oídio BASF cuenta con Dagonis® , el fungicida con eficacia excepcional y duradera, no solo para el control de oídio, también para otras enfermedades como alternaria y Mycosphaerella. Dagonis® destaca, sobre todo, por su eficacia de larga duración, su amplio espectro de aplicación y a su corto plazo de seguridad.
Mildiu
Los síntomas aparecen en las hojas como manchas amarillentas, estas llegan a necrosar, afectando a la hoja entera provocando que se seque.
Chancro gomoso del tallo
El hongo Didymella bryoniae, ataca a los tallos en semillero o recién germinados provocando la marchitez de las plantas. Los síntomas más frecuentes son lesiones en el tallo, produciéndose una podredumbre húmeda. Las lesiones aparecen también en los frutos oscureciendo, mientras que en las hojas se observan manchas amarillentas, alargadas que se necrosan.
Fusarium oxysporum
Ataca las plantas del melón en cualquier fase del desarrollo, invadiendo el sistema vascular. Una vez producida la infección aparecen manchas amarillentas en las hojas y en los nervios. Se puede apreciar necrosis y pardeamiento de los vasos conductores al realizar un corte longitudinal. Las manchas aparecidas en los frutos acaban en podredumbre.
Los principales virus que afectan a estos cultivos son:
MNSV, Virus del Cribado del melón
Provoca lesiones cloróticas, que evolucionan en necróticas en hojas, mientras que en frutos raramente se produce necrosis.
CMV, Virus del Mosaico del pepino
Este virus reduce el crecimiento de la planta, los frutos sufren un moteado. Se transmite por pulgones.
CVYV, Virus de las Venas amarillas del pepino
Produce el amarilleo de las venas, dependiendo del momento de la infección puede mostrarse en todo el cultivo. Se transmite por medio por mosca blanca.
Estrategias de control
Se deben seguir una serie de métodos de control para prevenir la incidencia de plagas y enfermedades en los cultivos de melón y sandía.
- Eliminación de malas hierbas y residuos vegetales del invernadero
- Colocación de mallas y dobles puertas para evitar la entrada de insectos
- Realizar rotación de cultivos
- Emplear semillas y plantas sanas procedentes de semilleros autorizados
- Desinfectar las herramientas de trabajo
- Empleo de trampas cromotrópicas, y de feromonas
Además, para prevenir y controlar la aparición de plagas y enfermedades se deben emplear soluciones fitosanitarias.