El cultivo de berries en España: plagas y enfermedades

España es el quinto productor mundial de frutos rojos y el primer productor europeo de fresa y arándanos, ocupando el segundo lugar en lo que se refiere a frambuesa.

Según los datos recogidos por el north_east Ministerio de Agricultura , en el año 2019, la producción de frutos rojos en España superó las 450.000 toneladas, incrementando su producción un 4% respecto al año anterior.

Debido a la popularidad adquirida en España en los últimos años, el cultivo de furtos rojos o berries se ha convertido en una oportunidad, puesto que muchos agricultores lo consideran como un cultivo de alto valor. Pero, ¿qué son los frutos rojos? Dentro de este grupo de frutos podemos encontrar desde la fresa hasta la frambuesa, la mora, el arándano, la grosella y la cereza. Si bien es cierto que con la fresa en España existe desde hace décadas una tradición en su producción agrícola; en el caso del resto de berries apuntadas, es desde hace sólo unos pocos años que se vienen cultivando en invernaderos.

Las cualidades que poseen las frutas del bosque son realmente beneficiosas para la salud, puesto que cuentan con un alto contenido de nutrientes y polifenoles. Estos deliciosos frutos son capaces de prevenir el envejecimiento y los problemas cardiovasculares, por ello, no es ninguna sorpresa el incremento de popularidad que han cosechado durante los últimos años.

Respecto a los lugares donde se cultivan las berries en España, el suroeste español es, por excelencia, el mayor centro de producción de berries tanto de España como de Europa, superado únicamente por Estados Unidos y Turquía a nivel mundial. Si entramos más en detalle, Andalucía es la Comunidad Autónoma con la mayor superficie plantada de frutos rojos, la cual ha crecido un 3,95% en el 2020 y donde se produce anualmente el 97% de los frutos rojos en España. Su producción se centra fundamentalmente en la provincia de Huelva, aunque también existen áreas de producción fuera de Andalucía, concretamente en Asturias y Galicia.

Si entramos en detalle de los frutos rojos producidos en Huelva, los datos son realmente prometedores. La frambuesa experimentó un crecimiento del 30% respecto al 2020, seguido del arándano con un 23% y un 6% en el caso de la fresa. Según estos datos recogidos por el Ministerio de Agricultura, Huelva concentró más del 90% de las fresas que se exportaron desde España, situándose como el principal país exportador de fresas del mundo desde el 2017.

Las diferentes situaciones micróclimaticas de Andalucía hacen de esta provincia la localización ideal para el cultivo de berries, puesto que aumentan las posibilidades de cultivo de las diversas variedades del fruto aprovechando las características propias de cada microclima. Por otro lado, en Andalucía las heladas son casi nulas y las características del suelo son las idóneas para cultivar bayas, debido a sus suelos áridos y con un bajo contenido de PH.

Principales plagas en el cultivo de berries (fresa, frambuesa, mora, arándano, etc.)

Las principales plagas que afectan al cultivo de berries son:

• Mosca de la fruta (Drosophila suzukii). Se trata de un insecto holometábolo originario de África. La hembra deposita sus huevos en las hojas, produciendo así una picadura que produce una infección de hongos que favorece el deterioro del fruto. El segundo síntoma lo producen las larvas que se alimentan de la carne del fruto y destruyen por completo la pulpa. Es posible que estos daños puedan pasar desapercibidos durante la cosecha, por lo que se debe extremar la precaución para evitar pérdidas durante la comercialización de los frutos.
• Pulgones (Aphis spiraecola, A. gossypii, A. citricola, Toxoptera aurantii, Myzus persicae). Se trata de una de las plagas más frecuentes en los cultivos. El daño que causan consiste en la sustracción de linfa, lo que se refleja en un debilitamiento de la planta, lo que hace que enfermen e incluso lleguen a morir. Su agresividad y su capacidad para transmitir ciertas virosis, hacen de esta plaga un potencial peligro. Su dependencia de factores ambientales y la presencia de enemigos naturales hace que en algunos casos la incidencia sea menor. En cualquier caso, el comportamiento errático de la plaga en condiciones adversas hace muy difícil su predicción.
• Trip (Scirtothrips aurantii faure). Se trata de una plaga proveniente de Sudáfrica que recientemente ha sido detectada en España, la cual ataca a los frutos rojos impidiendo su crecimiento y deformando su fruta. El insecto impide el desarrollo y crecimiento de las plantas, y también ataca a los frutos, causando graves daños en la cosecha y en su posterior comercialización.
• Araña roja (Tetranychus urticae). Este ácaro es muy frecuente en los cultivos de frutas del bosque, además de causar graves daños si no se trata correctamente. Se alimenta de las hojas del fruto causando una decoloración que en la mayoría de los casos deriva en manchas amarillentas. Si los ataques son violentos, el fruto puede tornarse de color gris sucio.

Principales enfermedades en el cultivo de berries (fresa, frambuesa, mora, arándano, etc.)

Las principales enfermedades que afectan al cultivo de berries son:

• La podredumbre carbonosa (Macrophomina phaseolina). Se trata de una enfermedad causada por un hongo patógeno propio de climas muy cálidos que ha logrado introducirse en zonas de clima templado. El desarrollo de esta enfermedad se debe al estrés térmico y al déficit de agua en el suelo. Esta enfermedad afecta al sistema radicular produciendo un ennegrecimiento en las raíces centrales y laterales.
• La podredumbre gris (Botritis cinérea). Se trata de unas de las enfermedades que más afectan a los cultivos de frutos rojos. Es causada por un hongo que produce un velo gris sobre la superficie del fruto, lo que deriva en una pudrición blanda, acompañada de ligeros cambios de color en los drupeolos infectados.
• El oídio (Podosphaera aphanises), también llamado ceniza, cenicilla o blanquillo, es una de las enfermedades más importantes en el cultivo de la fresa en particular afectando también a otros berries. Se trata de una enfermedad presente casi en la totalidad del ciclo de cultivo. Este hongo provoca manchas blancas en hojas y frutos que pueden causar grandes pérdidas en el cultivo si no se realiza una correcta estrategia para su control. Esta enfermedad fúngica aparece en forma de pátina blanca que recuerda a la ceniza, cubriendo las hojas, frutos, ramas y brotes de las plantas; afecta a la capacidad de crecimiento del cultivo ya que reduce la capacidad fotosintética de las plantas afectadas. En ocasiones, las hojas afectadas pueden volverse amarillas, enrollarse o caerse.