La innovación en la lucha contra las Enfermedades de la Madera de la Vid
Autores: Silvia Martinez | Miquel Sans
En España, tenemos la suerte de contar con un patrimonio de viñedo viejo único que debemos preservar. Hoy en día, por desgracia, son muchos los desafíos que quitan el sueño a los viticultores, y a largo plazo, ninguna amenaza es tan difícil de resolver como la de las Enfermedades de la Madera de la Vid (EMV), que pueden dañar drásticamente el viñedo, causando un aumento de costes y pérdidas financieras.
¿Qué son las Enfermedades de la Madera de la Vid?
Desde siempre han existido en los viñedos plantas adultas que morían, más lenta o rápidamente, por una afección general en toda la planta o bien en algún brazo de ella. Pero en los últimos años se han observado también plantas que mueren muy jóvenes, incluso en el primer o segundo año de plantación. La causa son las denominadas Enfermedades de la Madera de la Vid, EMVs, ocasionadas por un complejo de hongos que actúan en momentos diferentes a lo largo del ciclo vegetativo.
Se han determinado más de 130 especies fúngicas, aunque los hongos aislados más frecuentemente en cada una de las enfermedades y que penetran a través de las heridas de la poda son:
- Phaeomoniella chlamydospora, Phaeoacremonium spp y Fomitiporia mediterránea como agentes causales de la yesca
- Diplodia seriata y Botryosphaeria spp. como agentes causales del brazo negro muerto
- Eutypa lata principal hongo de la enfermedad denominada Eutipiosis
La incidencia de las EMVs es cada vez más importante en los viñedos, debido al estrés al que están sometidos para alcanzar máximas producciones. Y a pesar de que no hay estudios recientes sobre su afectación a la viña española, los datos publicados por el Grupo Operativo Vitinnat calculan que las enfermedades de la madera pueden llegar a costar 600 millones de euros anuales al sector sólo en coste de replantación.
La eficiencia y el control de costes en las producciones vinícolas, así como la prohibición del uso de ciertos productos fungicidas tradicionales usados para la prevención de las EMVs, han llevado a un incremento de la incidencia de estas enfermedades de alrededor de un 4-5%, lo que ha planteado un serio reto para el sector, que no solo ve mermada su producción, sino que afecta al coste de replantación y por extensión a la calidad del producto final.
¿Se pueden prevenir las Enfermedades de la Madera de la Vid?
La prevención de las EMVs es necesaria desde todas las fases del cultivo:
- Utilización de material de vivero sano y certificado
- Correcta gestión agronómica del viñedo
- Minimización de las fuentes de inoculo
- Protección de las heridas de poda para reducir nuevas infecciones
En este último punto, la prohibición del uso de ciertos productos fungicidas tradicionales como el arsenito sódico, hace que se haya potenciado la innovación en un sector con tanto peso, pero muchas de las estrategias de prevención que han aparecido no han demostrado aún que sean suficientemente efectivas. Así, la aplicación de pasta de cobre, la termoterapia, o las trichodermas han demostrado tener resultados limitados.
Fruto de muchos años de investigación, BASF ha lanzado al mercado Tessior®, una formulación innovadora que ha demostrado ser altamente efectivo para reducir la incidencia de las EMVs gracias a una doble actividad de sus componentes.
¿Qué es Tessior®?
Tessior® cuenta con dos fungicidas de amplio espectro de BASF, F500® y Boscalida, que confieren una barrera química que evita que las esporas de los hongos entren en los vasos de madera. El tercer componente es un polímero a base de agua, que forma una capa protectora que se endurece después de ser aplicado sobre la superficie de la herida. En la figura 1 se observa cómo quedan los cortes de poda con la aplicación de Tessior®.
Se ha demostrado que el riesgo para las infecciones de los hongos tras la poda es máximo a las 24h posteriores y hasta los 3 meses siguientes, por lo que es muy importante tras la poda proteger las heridas de las cepas. Con Tessior®, el polímero forma una barrera física que confiere hasta tres meses de protección a las heridas.
La innovación no solo está en la nueva formulación (asociación de dos fungicidas de amplio espectro más un polímero) sino también en su manera de aplicación. Es lo denominamos Sistema Tessior® .
Tessior® se aplica, directamente sin dilución previa, con un dispositivo de aplicación específicamente desarrollado que permite aplicaciones efectivas del producto directamente sobre las heridas de poda.
Este dispositivo se ha desarrollado juntamente con dos importantes empresas especialistas en sistemas de aplicación como son MESTO y FELCO, y permite:
- Una aplicación precisa sobre las heridas de poda
- Una aplicación rápida y sin riesgo de deriva del producto
- Una aplicación cómoda y segura para el aplicador
Un enfoque holístico
Sistema Tessior® de BASF se ha desarrollado dentro del enfoque holístico en el que se debe trabajar para la defensa de las EMV, desde la necesidad de una prevención desde todas las fases del cultivo, como hemos mencionado anteriormente.
Esto conlleva a un trabajo conjunto de todos los actores implicados; agricultores, viveristas, técnicos, centros de investigación, casas comerciales, empresas de tratamientos, para crear un frente común para la reducción y contención de este conjunto de enfermedades que tanto afectan a la rentabilidad del viticultor.
Con Tessior® ayudamos a la preservación del viñedo y la calidad del vino.